Heladas

¿Cuándo se produce una helada?

Una helada ocurre cuando la temperatura baja tanto que el agua dentro de las plantas se congela. Esto daña sus tejidos y puede llegar a matar brotes, flores o frutos.

 

¿Qué daños provoca?

El hielo dentro de las células perfora sus paredes y las seca. Los brotes jóvenes y las flores son los más sensibles porque tienen más agua. Las heladas pueden arruinar yemas, flores y frutos en desarrollo, dejando deformaciones o pérdidas totales.

 

¿Qué factores influyen?

 

 Nubes: ayudan a retener el calor y reducen el riesgo.

 Viento: mezcla el aire frío con el más cálido y disminuye la posibilidad de helada.

 Humedad: si el aire está húmedo, la formación de rocío o hielo libera calor y protege algo a las plantas; en aire seco, el riesgo es mayor (helada negra).

 Suelo y vegetación: el suelo desnudo y húmedo guarda más calor; las malezas o el suelo suelto aumentan el riesgo.

 

¿Cómo se pueden prevenir o combatir?

 

  1. Defensa pasiva (prevención)

 

Elegir bien la zona de cultivo, evitando lugares bajos donde se acumula aire frío. Escoger especies o variedades más resistentes (los cítricos son muy sensibles; el manzano, más resistente).

Orientar bien las hileras, podar de manera que las yemas queden más altas y manejar el suelo (limpio, húmedo, compacto).

Consultar mapas de riesgo de heladas para planificar la producción.

 

  1. Defensa activa (durante la helada)

Se aplican cuando la temperatura ya está bajando:

Aspersión de agua: mantener las plantas mojadas evita que bajen de 0 °C.

Calefactores o quemadores: se colocan en el campo y aumentan la temperatura unos grados.

Ventiladores o hélices: mezclan el aire frío con el cálido.

Helicópteros: cumplen la misma función, pero son caros.

Otras técnicas: cortinas plásticas, humo, radiadores o combinaciones de las anteriores.

 

Quema de cubiertas

Bajo ninguna circunstancias se deben quemar cubiertas como método de prevención. Esta práctica está prohibida por ley debido a su grave impacto ambiental y de salud. Al generarse la combustión aparecen gases tóxicos que afectan principalmente el sistema respiratorio, con signos de asma e incluso cáncer, también causan enfermedades de piel, ojos e inclusive afecciones cardíacas.

 

Por otro lado, el método no es eficiente, al quemar cubiertas solo crea una densa capa de humo que cubre el aire, pero no eleva la temperatura del suelo lo suficiente como para proteger los cultivos de la helada.

Especie Receso Invernal Yemas cerradas Plena floración Pequeños frutos verdes Fruto 2 cm.
Duraznero -26,1° -3,9° -2,8° 1,1° -3°
Cerezo -28,9° -2,8° -2,2° 1,1° -3°
Peral -28,9° -3,9° -2,2° 1,1° -4°
Ciruelo   -3.4° -2,2° 1,1° -2°
Manzano   -3,9° -2,2° 1,7° -4°
Almendro   -3,3° -2,7° 1,1°  
Damasco   -3,8° -2,2° 0,5°  
Nogal   -1,0° 0,5°    
Olivo     0,5°